La existencia del ser humano siempre ha estado moldeada por el deseo de recrearse. Pero, ¿qué sucede cuando ese límite entre lo divertidor y lo demasiado se borra? La línea que separa el gozo del perjuicio puede ser difícil de trazar, y el caos en la búsqueda de lo placentero puede tener consecuencias indefinibles. Analizar el fenómeno d